¿En qué consiste una sociedad sana?

Por Clary Pazos

El presente aporte comienza con la siguiente pregunta: ¿Y en qué consiste una sociedad sana? Aristóteles (s/f), se refiere “a la felicidad como el supremo entre todos los bienes que pueden realizarse” y, ciertamente, la felicidad es "el bien máximo que se aspira conseguir”

Es decir que, esta búsqueda incesante la realiza un grupo humano que vive y convive en comunidad y ésta solo existirá si se ha construido una sociedad que permita a sus miembros la convivencia. La sociedad sana es una propuesta del deber ser a partir del poder ser, en donde la aplicación de estrategias de comunicación basadas en la discusión ética, permitan a través del diálogo lograr una sociedad de convivencia.

Se puede decir que, los valores son expresados en la interacción social mediante acciones, actitudes y juicios valorativos, cuyo contenido y significado tienen relación con los sentimientos y emociones, creencias y preferencias, estados de conciencia, circunstancias, necesidades, motivaciones e intereses, normas y patrones de comportamiento, ideales, metas u objetivos, conocimientos y experiencias del individuo en su contexto social. Es por ello que, las acciones, actitudes y juicios valorativos se traducen en lo que dicen (comunicación verbal: oral/escrita) y lo que hacen (comunicación no verbal: gestos/posturas/movimientos) los sujetos.

Desde una perspectiva moral, los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. La ética obligación efectiva del ser humano que lo debe llevar a su perfeccionamiento personal, el compromiso que se adquiere con uno mismo de ser siempre más persona; cuando una acción es conveniente o favorable es considerada buena y cuando perjudica o destruye es calificada como mala. Las cualidades buenas son llamadas valores y las malas antivalores. Vale la pena mencionar que, la situación que viven los países latinoamericanos afecta necesariamente los procesos de socialización y de educación.

Para concluir, estamos viviendo en un mundo sujetos a cambios y transformaciones en las cuales las preguntas por el sentido de la vida y la vida misma recobran una verdadera importancia, por lo tanto, debemos practicar siempre los valores humanos ya que son herramientas que nos abrirá las puertas del camino que hemos elegido en nuestras vidas y que debemos reflejar en nuestra familia y transmitirlo a la sociedad, para ser cada día mejores personas.